Esta antigua aldea ha vuelto a tener vida. Y tal y cómo dicen ellos: no hay nada mejor que ver salir por estas tierras humos de las chimeneas. Sin duda el
turismo rural y de calidad se está posicionando en la Comunidad Valenciana. Saben lo que viene buscando la gente cuando decide alojarse en estos establecimientos, y cumplen con todos y cada uno de los requisitos. Las vistas del Maestrazgo, una de las zonas más bonitas de nuestro territorio, hace el resto.
Son dieciocho suites, repartidas por la aldea, las que ofrecen tranquilidad, un confort de cualquier hotel urbano, o incluso mejor, y un trato familiar y cálido. Más que una casa rural es como trasladarse a una pequeña población por la que no ha pasado el tiempo.
La decoración de las habitaciones es única ya que han respetado en muchas ocasiones las paredes de piedra, las ventanas que antes eran graneros o las vigas del techo. Sin duda han combinado la paz y calidez de los materiales nobles que proporciona la naturaleza y las
casas antiguas, con la comodidad y funcionalidad de la ciudad, logrando un equilibrio perfecto entre ambas. En las habitaciones, en definitiva en Aldea Roqueta, no hay teléfonos ni televisiones, pero te aseguran en todo momento la comunicación e incluso conexión a internet.
En las zonas comunes de la aldea hay libros, mesas de billar, vinilos y mucha luz cálida e incluso una piscina natural además de un estupendo restaurante. Muy recomendable para salidas románticas, ya que tienen packs especiales. Apetece tanto.
En DolceCity Valencia:
Aldea Roqueta 
