Yo recuerdo que, hace unos años, alguien te decía: ‘tal niño va a celebrar su cumpleaños en una ludoteca’ y tú preguntabas: ‘¿dónde?, ¿está enfermo? ¿es grave?’. Por lo menos yo. Luego ya descubrimos que las ludotecas eran pequeños centros de ocio para los niños, para que pudieran divertirse un rato y celebrar sus fiestas con amigos, juegos, etc…Ahora ya no se pregunta ‘¿qué es una ludoteca?’.
El problema, hasta ahora, de las ludotecas, era que se pensaba mucho en los niños y poco en los padres: a éstos últimos se les ponía unas mesitas y unas sillas y podían pedirse unas papas y una cocacola mientras esperaban a sus hijos (viendo cómo se divertían). Ahora es un poco mejor: ludotecas como
Colorín Colorado ofrecen a los padres la posibilidad de salir de casa, cenar, pasar un rato tranquilo mientras sus hijos están bien cuidados.
El caso de la Abadía de los Peques es muy parecido: ha nacido de la
Cruz Blanca, una de las cervecerías de referencia de Valencia; ellos han pensado en los padres que quieran ir a tomar una cerveza o una copa a la Cruz Blanca y, al mismo tiempo, pueden dejar a sus hijos justo al lado (está pegado a la Cruz Blanca), en la Abadía de los Peques, donde tienen todo tipo de actividades y entretenimiento.
También pueden ir padres que se quieran quedar directamente viendo a sus hijos, que la Abadía de los Peques tienen mesas y sillas para tomarse algo.
A mí me parece muy buena idea.
En DolceCity Valencia:
Cervecería Cruz Blanca