
El dueño del restaurante es Cordobés y quiere que se note que ha traído un trocito de sus tierras a Valencia: una barra para ir tomando algunas tapas de pie mientras disfrutamos de finos y manzanillas fresquitos que nos harán olvidar en qué ciudad estamos. Cómo no podía ser de otra manera, decoración alrededor del mundo de la tauromaquia y las costumbres andaluzas: fotos, farolillos, cabezas de toro…

Y por si quieres probar de todo, ellos te ofrecen entre raciones y medias raciones, para que no tengas que elegir y no te arruines probando la carta entera de platos que tienen.
Ya al acabar de cenar volvemos a salir a la calle esperando ver la Mezquita de Córdoba y nos encontramos que seguimos en la capital del Turia. Habrá que ir para el sur alguna vez.
En DolceCity Valencia: La Goyesca