Así que si sois de los míos quiero compartir con vosotros el ranking de las cinco mejores palmeras de chocolate que pueden degustarse en toda Sevilla. Una labor de documentación que me ha supuesto un duro esfuerzo como podréis sospechar. Ahí van.
1- Zuccaro
La primera vez que fui a comprar el pan (lo hacen artesano) a esta pastelería-panadería fijé mis ojos en un cartel que decía: “las mejores palmeras de Sevilla”. Y claro, a una le ponen semejante reclamo ante las narices que no le queda otra que comprobarlo.
Bien, mi veredicto no puede ser otro que el de darle toda la razón al autor se tal afirmación, y es que las palmeras de Zuccaro son algo fuera de lo común.
De tamaño XL, aconsejo compartir si no quieres pillar un empacho, el chocolate de estas palmeras es un espectáculo, algo que ya había podido comprobar en sus tartas, ya que es el mismo. Es suuuuper crujiente y se filtra entre las capas de hojaldre (de una calidad magnífica también), así puedes encontrar gotitas solidificadas de delicioso chocolate en el dorso de la palmera. Ay, esas gotitas…
2- Suitcake
Ya sabéis que soy fan de esta pastelería artesana y sus tartas, pero no sé si os había hablado de las palmeras que hacen, que aquí toman la dimensión de alta repostería.
Creo que las fotos hablan por sí solas, pero una que las ha catado, os dice que son algo que HAY que probar. Tienen un montón de variedades, diferentes tipos de chocolate, crema pastelera tostada con un toque de anís, dulce de leche, lemon curd… bueno, bueno, bueno…
3- Lalita Café
Esta cafetería cuenta con obrador propio y cuando me pillaba más cerca de casa iba exclusivamente a llevarme sus palmeritas de chocolate para el postre. Estas son en versión algo más pequeñita, y su hojaldre es una maravilla, muy muy crujiente (una señal de que es casero y no precocido), y encima a veces las hacen de chocolate de color rosa, ahí atacando a mi vena maleni…
4- Manu Jara
Y no podemos hablar de dulces en Sevilla sin nombrar al maestro repostero Manu Jara. Vale que todo lo que hace está espectacular, pero por esa misma razón sus palmeras no podían ser menos. Bañadas hasta la mitad con diferentes tipos de chocolate, con bolitas crujientes y un maravilloso “crack” al hincarles el diente.
Y por último no quería dejar de mencionar la versión en helado de este dulce, y es que suelo ir específicamente a La Fiorentina para pedirme este helado. Y sé que quizá no sea de los mejores, de los más refinados o sutiles, pero es que cuando lo tomo experimento un viaje al patio del colegio, a las meriendas de la infancia, porque este lado sabe a esas palmeras de antaño.
En DolceCity Sevilla: Zuccaro, Suitcake, Manu Jara, Lalita Café, La Fiorentina