Fallé en lo de relajarme, la cantidad de gente que había en él oscilaba entre la marabunta y el lleno hasta la bandera, pero acerté en lo de pasar allí un buen rato. Porque me vinieron muchos recuerdos a la cabeza, ¡ay, cuántas clases de viernes por la mañana escaqueadas del colegio para irme a ver el último taquillazo de Hollywood! Y es que, hace años, La Vaguada era uno de los pocos centros comerciales de Madrid cuyos cines ponían películas a las 12 de la mañana (una sesión a la que acude solo gente sospechosa, todo sea dicho).
El centro comercial está tal como lo recordaba, pero con un lavado de cara que lo ha dejado fresco como una lechuga, limpio como una patena y cualquier otro latiguillo que se os ocurra. La Vaguada es veterano, pero no viejo, y ha sabido subirse al carro de la vanguardia manteniendo sus señas de identidad (esos cines que aguantan como unos titanes, con las mejores bolsas de palomitas saladas que yo probé en mis años mozos; ese parque para niños en su planta superior; esos recreativos para grandes y pequeños) y añadiendo unas cuantas tiendas y servicios de lo más necesarias.
¿Sabes que puedes comer en el Flunch de la planta baja por menos de 5 euros? Repito: de lunes a viernes por menos de 5 euros, y sales lleno. ¿Sabes que puedes pasar de la zona de comidas/cine (planta superior) a El Corte Inglés por su pasillo exterior sin tener que recorrer de nuevo todo el centro comercial? A mí me vino de perlas para pasar en un par de minutos de ver los estrenos a comprarme "Oscuro", un novelón de terror de Teo Rodríguez que os recomiendo a todos. Por no mencionar esas tiendas clásicas como su gran Disney Store, el Foot Locker, el recién importado Taco Bell y sus innumerables tiendas de ropa: Massimo Dutti, Zara, Benetton, Springfield, Ayso, H&M, etc.
Además, parking, un Starbucks, un curioso local de roscas de canela (Cinnamon Rolls), zonas de exposiciones y actividades, cascadas de agua bien bonitas, y no me fijé si sigue el kiosco de abajo donde me compré este libro, espero que sí. La Vaguada sigue siendo uno de los centros comerciales de referencia de Madrid. Y si a la salida quieres andar un ratito hasta Akira Cómics no pienso quitarte esa brillante idea de la cabeza.
PD. Aquellos mapas que tan útiles le parecían a Marta para situarse en La Vaguada no solo es que sigan estando, ¡es que han sido mejorados! El que tienen a la entrada, táctil, es fenomenal.
En DolceCity Madrid: Centro Comercial La Vaguada
