Recuerdo cuando se construyó hace varios años ya (concretamente, el 26 de septiembre de 2002), que fue un hito en los centros comerciales de la capital. Tiene una extensión de 65.000 metros cuadrados y más de 150 establecimientos. Desde su nacimiento destacó por su completa oferta en tiendas de moda, complementos, hogar y decoración.
Asimismo, tiene una gran variedad de restaurantes donde puedes elegir entre todo tipo de comida. Todos los países tienen cabida en Tres Aguas. También tiene cines y una gran oferta de ocio que hará que llegues allí por la mañana y salgas de madrugada. Todo sin moverte del mismo lugar. No está mal.
Además es un centro comercial muy, muy bonito, es un lugar muy agradable donde pasar las tardes de verano. Sus zonas exteriores invitan a ello y sus dos plantas permiten ver el paisaje diseñado compuesto por fuentes, plazas y zonas de descanso.
Yo antes iba mucho por allí porque mi cuñado vivía muy cerca y mi hermana y yo íbamos a pasar el día. Allí conocí y probé por primera vez Los 100 montaditos, que llamaba la atención porque decían el nombre que querías en voz alta para recoger tu pedido. Ahora, seis años después, esta cadena está presente en todo Madrid.
Eso fue para mí el Tres Aguas. Un centro comercial novedoso, mucho más grande que los que había hasta el momento, y con un diseño que invitaba a quedarse allí muuuuchas horas. Aunque, he de reconocer, que es muy difícil en un solo día visitar los 150 establecimientos, comer tranquilamente, ir al cine y tomarte una copa.
Mejor lo hacemos en dos días ¿no?
En DolceCity Madrid: Centro Comercial Tres Aguas
