Son ya muchos años escribiendo en DolceCity. Y los dos últimos he ido anunciando la reapertura del Mercat de Sant Antoni sin demasiada suerte. Desde que empezaron en 2009, las obras se han ido alargando y ganando en complejidad hasta que, finalmente, este 2018, por fin, han terminado. Lo dijimos al presentar los nombres que marcarían el presente curso y, por fin, no nos equivocamos. La semana pasada reabría el histórico Mercat de Sant Antoni y el fin de semana, Barcelona lo celebró con una gran fiesta, con muchos vecinos y vecinas que quisimos darle la bienvenida de nuevo.
Como ya era antes, se trata de un mercado impresionante. Con su estructura original construida entre 1879 y 1882 y obra del arquitecto Antoni Rovira i Trias, el Mercat de Sant Antoni ocupa ahora una superficie total de cerca de 53.400 m2 distribuidos en cinco plantas, cuatro de ellas subterráneas. Los visitantes, como una servidora el pasado sábado, disfrutamos de la planta a nivel de la calle, donde hay unas cincuenta paradas de alimentación y muchas otras de los encantes, con ropa, complementos y objetos para el hogar.
Con la remodelación, tanto las paradas como los pasillos han ganado en espacio y comodidad. Lo que no ha cambiado es el tradicional mercado dominical de libros que seguirá animando el barrio cada último día de la semana. La diferencia es que ahora no lo hará desde las antiguas paradas con toldos sino debajo de unas marquesinas retrácticles que son una de las novedades más destacadas del nuevo Mercat de Sant Antoni. Otras son un gran supermercado en la primera planta subterránea y, ya de cara al otoño, un gimnasio. Y, finalmente, también la posibilidad de admirar los restos arqueológicos que se encontraron en el proceso de rehabilitación, como una parte de la muralla medieval, la contramuralla y hasta restos de la Via Augusta en un museo al aire libre que todavía no ha abierto, pero que promete ser la cereza final de un mercado con mucha historia que tiene muchos nuevos capítulos por escribir a partir de ahora.
En DolceCity Barcelona: Mercat de Sant Antoni
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