Milano, coctelería clásica en el centro de Barcelona

Este fin de semana pasado vinieron unos amigos de Madrid. Tras una cena a base de tapas de diseño en el Borne, llegaba la pregunta de dónde ir para tomar algo. Al ser un grupo numeroso (unos doce) era impensable ir a alguno de los minúsculos bares de la zona o del Raval, a parte que yo ya estoy en una edad que no me apetece nada estar aprisionada mientras tomo algo (de hecho, nunca me ha gustado). Total, que una amiga, allí presente, sugirió el Milano, un cocktail-bar inspirado en las coctelerías clásicas de toda la vida, donde los sillones rojos invitan a disfrutar de tu combinado con tranquilidad y buena compañía.

Y, la verdad, es que acertamos porque había sitio de sobras para todos y los visitantes madrileños acabaron satisfechos, habiendo sabido apreciar la calidad del producto servido. Cócteles clásicos o nuevas interpretaciones, una extensa carta de whiskys, posibilidad de picar algo… hacen del Milano un nombre más a tener en cuenta en el circuito de coctelerías de la ciudad, bastante limitado, todo sea dicho.

Este es un proyecto de Juanjo González, a quien pude conocer tras la barra del Negroni, que ha querido continuar con la esencia de barman, pero en un ambiente completamente alejado del local de Joaquín Costa, pues aquí se ha pensado en el Hollywood de los años 40 para su decoración. El único inconveniente es que, al estar situado en un subterráneo, hay que fijarse bien donde está la entrada y bajar, primero, unas escaleras. Un toque de clandestinidad que casa perfectamente con el espíritu de esos años glamurosos de la ley seca en los que el Milano no hubiera desentonado nada.

En DolceCity Barcelona: Milano Cocteleria